SEGUNDA MANUALIDAD: JOYERO DE KUMIHIMO
INTRODUCCIÓN:
La segunda manualidad que he realizado se trata de un joyero, que he realizado empleando la técnica del kumihimo.
El kumihimo es una forma de trenza japonesa mediante la cual se fabrican cuerdas y cintas entrelazando hilos.
En un principio, los cordeles se trenzaban a mano, pero, posteriormente, se inventaron diferentes instrumentos como el muradai y el takadai, de forma que se podían realizar trenzas más complejas y en mucho menos tiempo.
MURADAI
TAKADAI
En la actualidad, los que suelen emplear los aficionados son para utilizar de forma manual, estos, están hechos de espuma firme pero flexible de plástico que se puede utilizar como muradai portátil. Los discos tienen 32 ranuras en las cuales introduces el hilo para ir creando tus manualidades realizando la técnica del kumuhimo.
MI TRABAJO:
Este segundo trabajo lo realicé en forma de joyero, ya que quería huir de lo que se suele hacer siempre con los discos de kumihimo que son pulseras o collares.
Para realizar el trenzado del kumihimo se cojen ocho hilos, o bien se cogen cuatro y se doblan a la mitad, de forma que sean ocho.
Se colocan los hilos a ambos lados de los puntos negros,
y una vez situados los hilos se empieza a trenzar.
Para trenzar, se coloca el círculo de forma que quede el número 1 arriba, el 16 abajo, el 8 a la derecha y el 24 a la izquierda.
Una vez colocado el disco, se sube el hilo de abajo de la derecha a arriba a la derecha, al espacio vacío que está justo al lado (como se ve en la imagen). Luego, se coge el hilo que está arriba a la izquierda y se pasa para abajo a la izquierda.
Una vez hecho eso, se gira el disco a la derecha y se vuelve a repetir el proceso.
Esto es, se sube el hilo de abajo de la derecha a arriba a la derecha, al espacio vacío que está justo al lado. Luego, se coge el hilo que está arriba a la izquierda y se pasa para abajo a la izquierda.
Al hacer esto, se vuelve a girar el disco hacia la derecha, y se sigue repitiendo el proceso continuamente hasta que se termine el hilo.
Al ir trenzando, irá quedando un resultado como el que aparece en la imagen.
Para realizar este joyero, fue necesario hacer varias trenzas de gran tamaño, ya que al ir enroscando, se gasta mucha trenza.
Una vez trenzado todo el trapillo necesario, se procede a realizar el joyero propiamente dicho. Para eso, se coge una trenza y se empieza a enroscar lo más apretado posible, de forma que valla quedando una forma circular toda junta.
Se empieza haciendo el círculo de bajo, que será la parte de abajo del joyero. Una vez hecha la parte de abajo, se empieza a enroscar en las esquinas del mismo para hacer los lados de joyero.
Se sigue enroscando el trapillo trenzado haciendo las paredes del joyero, pegando una trenza detrás de la otra, y de esta forma se van haciendo las paredes del joyero, hasta conseguir el resultado deseado.
Una vez realizadas las paredes del joyero, se hace la tapa del joyero empleando otro trozo de trapillo trenzado.
Para empezar ese hace la parte por donde se va a sujetar la tapa, de forma que quede hacia fuera de la tapa. Esto es, se coge un extremo de la trenza y se dobla a su lado sobre sí mismo.
Una vez realizado eso, se empieza a enroscar tomando como base la parte que va a servir como lugar para sujetar.
Para enroscar, se seguirá el mismo proceso como para hacer la parte de abajo del joyero, hasta que se termine la trenza.
Al final del proceso de la realización de la tapa, el resultado es el que se puede apreciar en la imagen que está al lado.
Después se le da la forma según se quiera que sea la tapa, es decir, si se quiere que esté hacia arriba, o hacia abajo, de forma que se introduzca ligeramente hacia dentro del joyero.
Al final del proceso, el resultado sería este.
Si queremos que el joyero sea más vistoso, se puede decorar. En mi caso, lo voy a decorar de forma infantil, ya que va a ser un regalo para una niña pequeña, para eso voy a emplear un hilo dorado para hacer los bordes y formas de mariposas y flores de varios colores.
Cogemos el hilo dorado y los pasamos por las juntas del joyero, de forma que le aporta colorido al mismo, además de tapar las pequeñas marcas de pegamento que se podían ver.
Una vez hecho eso, se hacen las decoraciones, para eso, se hacen tres círculos de distintos tamaños para hacer las flores, y se van pegando ordenadamente de más grande a más pequeño.
Par hacer las mariposas, se dibuja la forma en el fieltro, se recorta y se le pintan los bordes y algunos detalles.
Finalmente, se pegan las flores y las mariposas de la forma que más nos guste. Ese será el resultado final.
ALGUNAS COMPLICACIONES:
Al realizar esta manualidad, me surgió una complicación debido al pegamento que utilizada, ya que al calentarse la pistola, echaba demasiado pegamento y salía por las esquinas del trapillo, por lo que quedaba una estética poco favorecedora, y el resultado no me satisfacía de todo.
Para solventar este problema, decidí poner la cola de ratón por los bordes del joyero, lo que hace que, por un lado no se vea los restos de pegamento que pudiesen quedar a la vista, y, por otro, aporta más colorido al joyero y, en mi opinión que da más alegre y divertido.
MATERIALES EMPLEADOS:
Los materiales que he empleado para esta manualidad son los siguientes:
- Disco redondo de Kumihimo
- Trapillo de color azul
- Tijeras
- Pistola de cola
- Barras de pegamento para la pistola
- Cola de ratón color dorada
- Fieltro de color azul oscuro, azul claro y rosa claro
- Bolígrafo azul
CONCLUSIÓN:
Creo que ha sido un proceso muy laborioso y cansado, ya que es necesario trenzar mucho trapillo para conseguir el tamaño deseado, pero creo que el resultado es muy satisfactorio, por lo que ha merecido la pena.
